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La prevención secundaria en la atención temprana de sorderas infantiles (parte III)

Parte III: Atención Temprana
Respecto a la concepción de Atención Temprana se parte del marco teórico planteado por la doctora Coriat y sus aportes sobre Estimulación Temprana.

Entendiendo que estimulación no es lo mismo para todos y temprana es una adjetivación relacionada al tiempo o momento en que algo sucede o sucedió, pero su significación cambia con relación a lo sustantivo de los que se está sucediendo.

Se utiliza el término “temprano”, en lugar de “precoz”, ya que es necesario destacar que se ayuda a desarrollar sus potencialidades y no a anticipar conductas o pautas del desarrollo, para recuperar el handicap que presenta.

La finalidad es la potencialización máxima de las posibilidades mediante una estimulación con regularidad y continuidad, haciendo hincapié en todas las áreas sensoriales pero de ningún modo forzar los tiempos establecidos en los que se produce la maduración del sistema nervioso central. (Jaime Tallis y otros)



La Atención Temprana está dirigida a todos los niños entre 0 y 4 años de edad, siendo de vital importancia la participación directa de los padres, como sostén del crecimiento y desarrollo de sus hijos.

La Dra. Coriat en el libro de Jaime Tallis y otros define a la estimulación temprana de la siguiente manera:



“La Estimulación es una técnica para ayudar al niño con problemas del desarrollo a superar estos trastornos o moderar sus efectos. Es a través de la madre que se introduce en el campo de la relación, con su hijo, los elementos que apoyarán al niño afectado por deficiencias.

Como estamos hablando de niños y no de cosas, no se trata de reparar sistemas nerviosos o de colocar información en su debido lugar como se haría en una biblioteca, sino de ofrecerle al niño la posibilidad de recuperar o construir su lugar como persona.

Pero, ¿Qué es en definitiva la Estimulación Temprana? No es más que lo que todas las madres hacen espontánea y naturalmente con sus hijos en los primeros meses de vida desde que la humanidad existe como tal”. (CORIAT en el libro de Tallıs Jaıme y otros)



Es importante recordar que la estimulación temprana tiene lugar en un niño que presenta un síntoma o un desarrollo con particularidades, en gran parte de los casos ligada a una patología de orden orgánico.

La Atención Temprana se dirige al niño en su conjunto, y no a un determinado órgano, o función, es decir involucra a todo el niño, partiendo de la acción posible y no de la discapacidad específica que lo está afectando.

Se trata de una estimulación específicamente sistemática, es decir se trabaja con el niño día a día, teniendo en cuenta su edad y las expectativas que se quieren alcanzar. También es secuencial, ya que cada paso alcanzado por el niño en las diferentes áreas, sirve de punto de partida para alcanzar el siguiente, no forzando al niño a lograr niveles para los cuales no se encuentra preparado, lo que implicaría frustración y retraimiento en el momento o situación ante la cual no pueda desplegar sus posibilidades.

En la Atención Temprana el fundamento básico es la familia. Toda interrelación se da en el seno de la misma, pues un niño que posee limitaciones biológicas (sensoriales o de otra índole) necesita la contención de sus padres, en especial de su madre, que será el nexo que lo ayudará a que se constituya como sujeto independiente, con deseos de aprender sobre el mundo que lo rodea, garantizando en la manera de lo posible una evolución armónica. Por otra parte, la función paterna es de gran importancia , porque no solo sostiene a la madre para que puede sostener a su hijo, sino que contribuye a la existencia de un equilibrio necesario en la díada madre –hijo, garantizando en cierta forma que ésta primera relación no se cierre en sí misma.

La familia cumple un papel fundamental, porque a través “de una crianza estimulante los aspectos estructurales del desarrollo (maduración neurológica, constitución subjetiva y desarrollo cognitivo) se constituyan en base firme para los instrumentos de los que se sirve el infante para conectarse con su entorno (desarrollo psicomotor, de los hábitos, de la relación con los objetos, y el juego, del lenguaje, y de la socialización), se desarrollen del modo más armónico posible y permitan al niño ir complejizando y enriqueciendo paulatinamente sus esquemas de acción”.(Caniza de Páez S. en Escritos de la infancia,1993)

En función de lo anteriormente mencionado, se puede decir que la Atención Temprana actúa para que los padres, que se encuentran inmersos en un confuso sentimiento de dolor, angustia, rabia, y culpa puedan establecer una nueva comunicación, una nueva relación, valorizando y preponderando por sobre todas las cosas la filiación, que en un primer momento se encontraba interferida por la llegada de un bebé, en total oposición al que ellos esperaban, es decir al hijo deseado, encontrándose en este momento con un hijo con una deficiencia, capaz de producirle una discapacidad.

Pero además, en el caso de niños sordos, se trabaja puntualmente en la adquisición de una lengua considerando la importancia del período óptimo para lograr la adquisición del lenguaje, hallándose en total relación con el futuro desarrollo cognitivo.

Para finalizar se puede decir que en la muestra analizada se obtuvieron relevantes datos que nos conducen a la siguiente conclusión:

“las medidas preventivas secundarias utilizadas pertinentemente favorecen el accionar de la atención temprana permitiendo de esta forma evitar o paliar al máximo los efectos que pueden llegar a tener la sordera sobre el niño”.
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