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Montserrat Balada
El dia que, por fin, estos dos hermanos conocen a su admirado tío Javier, descubren que lo único que se necesita para ser un gran aventurero, como él, es ¡ser valiente!
Juan Ortega Bolivar
Por muy mágicos que sean, los Reyes Magos también necesitan nuestra ayuda. Pablo, un viejo pescador perdido en alta mar, conseguirá que nadie se quede sin regalos la Noche de Reyes.
Mar Pavón, Laure du Faÿ
El elefante tenía una trompa larguísima. Con ella ayudaba a sus amigos, pero el hipopótamo siempre se burlaba –¡Eso no es normal! Pero, ¿Qué es “normal”?
Olivier Tallec
Libro-juego pensados para potenciar las capacidades de observación de los pequeños. A través de la observación y del juego, hay que identificar a los protagonistas de cada situación.
Helena Kraljic, Maja Lubi
Sam es un niño que nos cuenta que no le gusta leer, ni escribir ni hacer cálculos. Tampoco le gustaba a su madre cuando era pequeña. Ambos tienen dislexia, una dificultad del aprendizaje que hace que justo lo que no le gusta hacer a Sam le sea más difícil. Pero Sam siempre recuerda lo que le dice su tía que muchos personas famosas e importantes han sido y son disléxicas.
Meritxell Martí Orriols, Xavier Salomó Fisa
Revive el cuento de Cenicienta con los escenarios pop-up de este libro que, como en un teatrillo, representan la magia del cuento clásico.
Anna Llenas Serra
Se le ponen al monstruo hilos de lana de los diferentes colores y que representan una emoción amarillo (alegría), azul (tristeza), rojo (rabia), negro (miedo), verde (calma) y rosa (amor)... El niño podrá hablar de lo que él siente a través del monstruo quitándole hilo a hilo al monstruo metiéndolo en botes anteriormente con el nombre de cada emoción.
Anna Llenas Serra
Se le ponen al monstruo hilos de lana de los diferentes colores y que representan una emoción amarillo (alegría), azul (tristeza), rojo (rabia), negro (miedo), verde (calma) y rosa (amor)... El niño podrá hablar de lo que él siente a través del monstruo quitándole hilo a hilo al monstruo y metiéndolo en botes anteriormente con el nombre de cada emoción.
Werner Holzwarth
Todo empezó cuando el topo asomó la cabeza por su madriguera y le cayó aquello gordo, marrón, que se parecía a una salchicha. De mal humor, se dispuso a buscar al culpable. ¿Pudo hacerlo una paloma? ¿Tal vez una vaca? ¿Encontrará el topo finalmente a quien lo hizo?
Anna Llenas Serra
El monstruo de colores ahora convertido en un maravilloso desplegable. Un regalo perfecto para cualquier niño/a. ¿Alguna vez os habéis hecho un lío con vuestras emociones? Pues eso mismo le ha sucedido al monstruo de colores, que deberá aprender a poner en orden la alegría, la tristeza, la rabia, el miedo y la calma.